Sólo los pobres (de espíritu) tienen conciencia (de clase)
Sólo los pobres de espíritu (las mujeres, los homosexuales, los negros, los sidosos) tienen conciencia de clase: de feminidad, de homosexualidad, de negritud, de enfermedad…
Los pobres de espíritu tienen disciplina, y saben lo que tienen que ser en cada momento: las mujeres, esto y lo otro; los homosexuales, aquello y lo de más allá. Son espíritus obedientes. Si se desvían de la recta heterodoxia, se les advierte y vuelven gregariamente al redil.
Los gregarios conocen en todo momento quiénes son: se lo dice el rebaño al que pertenecen, la clase en la cual se integran dócilmente. No tienen que buscar más adentro, en el pliegue oculto donde se inscriben los destinos personales: su tarea está determinada de antemano, sus cartas están marcadas.
Sólo los pobres (de espíritu) tienen conciencia (de clase): los espíritus (ricos, abundosos, indefinidos) tenemos conciencia individual. Sólo nosotros dudamos de todo, y más que nada, de nuestro lugar en la Tierra (si es que alguno hay para nosotros: los desclasados).
Escrito por Proteo a las 12 de Marzo 2004 a las 01:24 PM